sábado, 13 de abril de 2002

Cuasi Integral de Pedriza

13 de abril de 2002-Senda Termes ("La Integral de Pedriza"). Fabuloso rodeo a la Pedriza, y no menos fabulasa la compañía. El correo electrónico escrito el lunes posterior por Jesús es suficientemente interesante como para reproducirlo a continuación:
"No pudo ser pero dejamos el pabellón bien alto no os vayáis a creer. Un día con magia por las nubes que iban y venían, la niebla que de vez en cuando nos cubría, el recorrido que se mostraba misterioso y escondido por la nieve y el silencio tan solo roto por el viento, algún grajo y los rebuznos del pollino del refugio Giner que retumbaban hasta en lo alto de las Milaneras.

Precioso, no sabéis lo que os perdistéis . Empezamos a encontrar nieve hacia la mitad de la subida a las Milaneras y ya nos nos abandonó hasta el Collado de la Ventana . Es más, Alberto le cogió gustillo a eso de la nieve y a la hora de sentarnos a comer en el mencionado collado,lo hizo en la única y diminuta mancha de nieve que había. Al poco tiempo, inexplicablemente, sentía frío. Siguiendo con el relato , la trepada hasta Tres Cestos en las Milaneras, fue algo complicada por que la nieve estaba empezando a deshelarse y nos hacía ir con mucho cuidado.La marcha desde Tres Cestos hasta el Cº del Miradero lenta, abriendo huella aunque con nieve no muy profunda. Eso sí con mucho cuidado y viendo continuamente un paisaje distinto a nuestro alrededor. Tan pronto se cubría y nos caían unos preciosos copos de nieve como salía el sol. Y a lo lejos siempre todo invadido por un tono grisaceo ( color panza burra según definición de Alberto) que contrastaba con el granito pedricero cubierto por la blanca nieve.

La llegada al Cº del Miradero un espectáculo. Solos, todo cubierto de nieve y con muchas horas por delante para seguir disfrutando. Unas pequeñas dudas sobre si continuar o empezar a bajar ( creo que eran las 12:45 ), pero que se solventaron rapídamente. Había que seguir descubriendo la magia de este día y de los rincones que nos esperaban más adelante: el Comedor Termes, el dedo de Dios, la Esfinge, el Callejón de las Abejas...¡era imposible abandonar ahora!. Y así lo hicimos y además descubrimos las huellas de algún otro entusiasta que nos facilitaron la marcha.

Nos asomamos a los "huecos" que dejan las Torres, descubrimos y comprobamos lo lejos que habíamos llegado y lo alto que estábamos y disfrutamos de esos momentos y los grabamos....en nuestra memoria y en la del vídeo que transportaba y utilizaba Iñaki con algunos suaves golpes de Alberto cuando el aparato se negaba a funcionar. Cuando de nuevo nos metimos en el "circo" de la Pedriza, a la altura del Comedor Termes, Iñaki, en un irreprimible impulso místico se fue a la búsqueda del dedo de Dios. Nosotros, más terrenales, nos entretuvimos en mirarle como ascendía , casi levitando, por las nevadas laderas y en rellenar con nieve una cantimplora porque teníamos bastante sed. Después de algún que otro resbalón sin importancia, caminar por senderos inundados por el rápido deshielo, ser paridos por túneles de roca y descubrir que la Esfinge , así de cerca, pierde mucho de su misterio, pues llegamos al Collado de la Ventana con una hora de retraso sobre el horario previsto. Eran las 15:15.

Desde aquí al Collado de la Dehesilla todo sin ninguna incidencia y además ya sin nieve. Nos encontramos con un rebaño de cabras que no se asustaron demasiado de nosotros lo que puede significar que nos confundieron con parientes cercanos o que eran montañeros disfrazados. La pradera de los Navajuelos, estaba inundada . El mogote de los Suicidas en su sitio y la Bola de los Navajuelos nos contempló impasible mientras nos introducíamos en el tunel de acceso al jardín del Torro. Iñaki, habilmente descubrió un paso aéreo y evito la claustrofobia del agujero. Fotos al Torro y descenso sin incidentes hasta el Collado de la Dehesilla. Eran las 17:30 h. Una hora y media más de lo que habíamos previsto. Y desde aquí, decidimos que ya habíamos cubierto con creces los objetivos propuestos que entre otros eran el llenar la cabeza de imágenes bonitas para pasar con "alegría" la semana que se avecina, y por lo tanto que nos bajábamos hacia Canto Cochino. Lo del Yelmo lo dejamos para otra ocasión en la que venga más gente porque si no iba a ser demasiado gozo para nostros tres solos y ante todo y sobre todo somos montañeros generosos. Un saludo"