domingo, 14 de diciembre de 2003

Peñalara Los Claveles

Travesía Peñalara y Los Claveles. 14 de diciembre. Cierto que va a ser difícil encontrar un fin de semana en diciembre con el tiempo tan precioso, y yo que no puedo salir el sábado con Alberto y compañía por estar convaleciente de mi tempranera gripe. Tan cierto es, que apenas pude soportar mirar por la ventana el sábado...

Pero el domingo, el domingo puse el despertador a las 5:45h y seguí las huellas dejadas el día anterior por los compañeros. A pesar de ser un poco imprudente, a las 7:30h salía ya del helado parking de Cotos hacia Peñalara. Al llegar a la altura del desvío para el refugio Giner tiré hacia el valle que quedaba a su izquerda, para subir a derecho por la pala nevada. Arriba el paisaje me impresionó. Segovia aparecía teñida de un helador azul oscuro, el viento soplaba con fuerza y las nubes, entonces por debajo, se movían como una plaga. A un lado el sol, al otro las tinieblas. Llegando a Peñalara (9:15h) las nubes traspasaban el cordal y se rizaban para desaparecer diluyéndose en la calidez de la vertiente madrileña. Momento de tirar una foto. En la cima me topé con la primera persona que vi durante la jornada. Sin más me encaminé hacia los claveles que para crestear obligan por prudencia a calzar los crampones, y sin apenas descanso bajé hacia la laguna de los pájaros.


Es el momento ahora de cambiar crampones por raquetas y proseguí sin perder altura para más tarde caer sobre la laguna de peñalara. Impresionante la cantidad de gente que a esa hora subía por las distintas canales que desde aquí ascienden hacia Peñalara (hasta entonces no me había vuelto a topar más que con un par de reducidos grupos de montañeros). Subí al refugio y de ahí a Cotos. A las 11:30h en el coche y a las 12:45 h en la ducha de casa... Uno de los mejores días de montaña de mi historia... pese a la soledaz, o quizás gracias a ello. A refugio del viento temperatura agradable. Hasta pasadas las 10 de la mañana no se estabilizó el tiempo y venció el sol. Presencié la batalla matutina del meteoro...